Los bonos en divisa local son títulos de deuda emitidos por gobiernos o empresas en su divisa local. Los factores que condicionan la rentabilidad proceden de los tipos de interés locales, la revalorización del capital (cambios en la curva de rendimientos o la solvencia crediticia) y las divisas. Dado que los países se pueden encontrar en distintas fases del ciclo económico, los tipos de interés y las rentabilidades pueden no estar correlacionados con los de los mercados desarrollados. En vista del continuo crecimiento, los bonos en divisa local tienden a ser más líquidos que los bonos en divisa fuerte y la lista de economías con mercados de bonos locales invertibles/líquidos a los que pueden acceder quienes invierten desde el extranjero sigue aumentando.
Los bonos en divisas fuertes son títulos de deuda emitidos por gobiernos o empresas en otras divisas, normalmente en una divisa de un mercado desarrollado, como USD o EUR. Muchos países en desarrollo con rentas bajas y más débiles, "mercados fronterizos", tienen interés en realizar emisiones en divisas fuertes frente a las emisiones en su divisa local para atraer la inversión extranjera, ya que estas se perciben como de menor riesgo si se emiten como activos en USD o EUR.