¿Por qué ahora?
Si consideramos que la recesión es el escenario más probable este año, sería de esperar que los bonos gubernamentales obtuvieran buenos resultados. La razón es que suele estar respaldada por una política más acomodaticia de los bancos centrales y por comprarse como "refugio seguro". Este comportamiento histórico se podría repetir si persiste la incertidumbre en torno a la inflación y los tipos de interés.
Además, tras un fuerte reajuste en 2022, los bonos gubernamentales ofrecen ahora niveles de renta atractivos por primera vez en años. La rentabilidad del Tesoro a 10 años, que rondaba el 1,5% a principios de 2022, se sitúa ahora por encima del 3,9%1. En otras palabras, quienes invierten no necesitan asumir un nivel excesivo de riesgo crediticio para obtener una rentabilidad decente de la inversión.
¿Qué función tiene la deuda pública en una cartera?
Para los inversores que buscan diversificar sus carteras, los bonos gubernamentales de alta calidad pueden ofrecer protección en tiempos de incertidumbre en los mercados. Son una herramienta de diversificación muy útil y es probable que ocupen gran parte de las carteras de los inversores precavidos.
Los bonos gubernamentales de mercados desarrollados, respaldados por las mayores y más sólidas economías del mundo, están entre las clases de activos más seguras y con mayor liquidez. Los bonos gubernamentales suelen tener buenos resultados en periodos complicados y pueden ayudar a diversificar el riesgo en carteras multiactivos. A menudo se consideran una posible protección frente a la volatilidad de la renta variable y otros mercados de mayor riesgo, por lo que los bonos gubernamentales sirven como asignación principal para los inversores.
¿Cómo se comporta la deuda pública a lo largo de un ciclo de mercado?
Los bonos gubernamentales desempeñan un papel importante en una cartera bien diversificada en muchas fases diferentes del ciclo del mercado. Sin embargo, como se muestra en el siguiente gráfico, sus cualidades defensivas hacen que suelan ser los más rentables en periodos de recesión y de crecimiento más lento.
Dependiendo de los tipos de interés, quienes invierten pueden optar por comprar bonos gubernamentales de mayor o menor duración. En otras palabras, pueden asegurar mayores niveles de rentas comprando bonos a más largo plazo cuando los tipos parecen atractivos. Por el contrario, si los tipos de interés son bajos y es probable que empiecen a subir, pueden invertir en bonos a más corto plazo para proteger su cartera de los efectos negativos de los precios.